lunes, 29 de abril de 2013

II Jornadas sobre el Búnker de El Capricho

El pasado 5 de Febrero se aprobó su apertura al público 

Las II Jornadas sobre el Búnker de “El Capricho” tendrán lugar el 26 de Mayo 

Una nueva conferencia sobre el refugio antiaéreo construido en el Jardín Histórico de “El Capricho” durante la Guerra Civil Española y su contexto histórico se celebrará el próximo 26 de Mayo, domingo, a partir de las 11 horas a muy escasos metros de la fortificación militar. Será en el salón de actos de la Escuela Municipal de Música de “El Capricho” (calle Joaquín Ibarra, 28), lo que fuera la Casa de Oficios vinculada en tiempos al Palacio de los Duques de Osuna.

Contextualizando la instalación en “El Capricho”, a partir de Febrero del 37, del Cuartel General del Ejército Republicano de Centro dentro del devenir histórico del Jardín y del asedio sufrido por Madrid durante la Guerra Civil, la conferencia desgranará los aspectos históricos y arquitectónicos de lo que se conoció con el nombre el clave de “Posición Jaca”, apoyada en un amplio material gráfico y documental.

sábado, 13 de abril de 2013

¿Y si no existiera “El Capricho”?

 Habrá muchas preguntas que los vecinos de nuestro distrito podrán hacerse con mayor o menor fundamento, pero es casi seguro, y por dejar un resquicio a la duda, que a ninguno se le ha pasado por la cabeza plantearse esta. El Jardín Histórico de “El Capricho” es una parte tan consustancial a este distrito, y más al barrio de la Alameda de Osuna, que hablar de éste conlleva ya el pensamiento implícito de aquél. Sin embargo, y hay que acudir a uno de los periodos más oscuros y peor conocidos de la historia de esta magnífica finca, bien pudo dejar de existir o, cuando menos, llegar hasta nuestros días con una morfología bien distinta a la que tiene en la actualidad.

Las fuertes deudas contraídas por Don Mariano Téllez-Girón (1811-1882), XII Duque de Osuna, le obligaron en 1881 a emitir obligaciones hipotecarias por valor de 43 millones de pesetas, lo que para la época era una cantidad desorbitada, las cuales fueron aceptadas por la mayoría de sus muchos acreedores. Los bienes del Duque fueron valorados en 54 millones de pesetas en una operación que gozó del respaldo del Banco de Castilla. Sin embargo, tras la muerte de éste la situación financiera se agravó y la deuda creció de forma considerable hasta tal punto que, que ya en 1894, el Tribunal Supremo dictó sentencia fallando la incautación de los bienes del Don Mariano, en ese momento propiedad de su esposa, la princesa María Leonor de Croy y Loewenstein, en favor de los obligacionistas de Osuna con el fin de que con su progresiva liquidación se satisficieran sus créditos.